ABRIENDO EL 3er OJO
Totalmente ajena al mundo espiritual era mi vida. Nunca había sido creyente, me había casado por lo civil cuando era muy joven y simplemente respetaba todas las religiones y creencias, pero sin implicarme en ninguna. En 2008, con 43 años, era una madre ocupada al 200% con dos hijos pequeños y un trabajo fuera de casa.
En esta etapa me resultaba inconcebible entender porqué personas que tendría que tener a mi favor, sumando, se situaban en mi contra restando y ejerciendo mucha presión. Mucha. Con el tiempo y la Cábala entendí que no restaban, que se aproximaba una de mis crisis existenciales, de las duras, la de ciclo largo. Todo mi entorno colaboraba para su llegada y yo tendría que enfrentarme a ella sin herramientas, con las manos vacías y el corazón abierto.
〈 Es como ir a la deriva subido en un tronco inestable por aguas bravas y oir una catarata a la que te aproximas: es el momento del gran salto. Y lo tienes que hacer solo. Tocarás fondo y renacerás de tus cenizas. Interiormente habrás crecido, pero esos momentos críticos son duros en verdad. ¿ Te identificas conmigo, lector? ¿ Lo has vivido alguna vez ? 〉
Era 5 de Agosto de 2008 y nos encontrábamos de vacaciones con unos amigos. Ese día, a la hora de la siesta, mientras los seis dormían, me fuí al único sitio libre de la casa: el sofá. Fue tumbarme, cerrar los ojos, y algo espontáneo e inesperado ocurrió.
EXPERIENCIA TRANS
-Me trasladé a un PARAISO–
Un carrusel de colores vivos, intensos, eléctricos, se irradiaba desde una pequeña apertura, un ojo vivo que aumentaba y disminuía su sección…Le tenía frente a mis ojos cerrados, a unos 10 centímetros, y proyectaba sus colores a lo que se me asemejaba a una pantalla de cine, cubriendo la totalidad de mi campo de visión. Nunca antes había sentido nada igual. Colores índigo, magenta,blanco, verde, naranja, amarillo-dorado… se escapaban hacia mí sucediéndose y me inundaban con su luz.
Y con los colores, una sensación de PAZ y SERENIDAD extremas.
Se dice que el Tercer Ojo es un centro espiritual en medio de la frente, permite la habilidad de estar consciente de más dimensiones que simplemente la física.
Su apertura refuerza la intuición, el conocimiento y la conexión con la sabiduría eterna. En realidad, el desarrollo del Tercer Ojo es una INICIACIÓN. Te elevas a una cierta vibración y conectas con los sentidos espirituales. Algunos desarrollan la habilidad de ver el aura, otros de mirar en el reino astral, otros de tener revelaciones. Los sueños se recuerdan más fácilmente y se sienten sus significados. Ya no hay tanta separación entre soñar y estar despierto y la barrera entre las realidades es más suave.
Recuerdo que haciendo una divertida práctica con un maestro indio, hindú, de masaje ShiroChampi ( fundamentado en los principios de la medicina ayurvédica ) descubrí accidentalmente cómo puede activarse este ojo en otras personas. Si ya sentía admiración por esta cultura milenaria, este descubrimiento definitivamente la reforzó.
El dominio del ser humano de la mente y su laberíntico acceso a otros planos desde épocas remotas es asombroso.
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